Medidas de seguridad necesarias para tu web: SSL y más

Internet brinda múltiples posibilidades de monetizar tu tiempo o potenciar tu emprendimiento. En el caso de los emprendimientos, la web sirve para eliminar fronteras y acortar espacios. Un sitio online permite que más gente conozca tu empresa, tu negocios, tus productos o servicios.
Los costos de inversión, hablando específicamente de dinero, para tener tu propio sitio web, dependen de lo que dispongas y quieras hacer. Es real que existe la posibilidad de tener una web de forma gratuita. Lo que sí no se puede minimizar es la inversión de tiempo que se realiza cuando se crea una web.

El tiempo dedicado es realmente muy alto. Involucra no sólo la creación, el diseño y la configuración, sino también las horas invertidas a actualizar y subir contenidos, a gestionar el contacto con clientes y responder dudas. Los sitios web son mucho más que sólo dinero. Es por esto que hay que cuidarlos en extremo.

Es aquí cuando empezamos a hablar de lo que realmente importa (en este artículo): la seguridad de tu web. Así como internet ofrece muchas opciones para potenciarte y capacitarte, también hay mayor cantidad de fraudes y estafas.

Nadie quiere imaginar qué sucedería si hurtan o atacan una web propia o la base de datos de los clientes. Pero, muchas veces, es necesario pensarlo para poder llevar a cabo medidas que lo eviten.
Antes de que entres en pánico, vamos a contarte algunas medidas de seguridad necesarias para tu web.

#1 Obtén tu certificado SSL

La certificación SSL es fundamental para proteger tu sitio y generar confianza en los usuarios. Puedes activar tu certificado SSL tú mismo.

Se trata de un título virtual que acredita la identidad de una página web. Lo más relevante es que utiliza una tecnología de cifrado. Cifra la información para que no pueda descifrarse salvo que se tenga una clave determinada e individual. Cuando hablamos de cifrar, nos referimos al proceso de mezclar los datos en un formato ilegible. Para poder leerlos, sólo se puede hacer a través de la contraseña mencionada.

En el certificado SSL podrás encontrar información del título: el nombre del titular (quién lo pide); el número del certificado junto con la fecha en que se vence; una copia de la clave y la firma digital de la persona que lo autoriza.

La certificación SSL permite que tu sitio se navegue utilizando el protocolo HTTPS. Mediante este protocolo, la conexión entre el usuario y el servidor, es segura. Esto, puede visualizarse al principio de la URL.

#2 Realizar controles periódicos con un escáner de seguridad

Un escáner de seguridad suena a una visión de rayos “X” de tu sitio. Una radiografía de todos los cimientos de tu web. La realidad es que es un poco eso.

Un escáner web sirve para analizar tu sitio a fondo. Esta es la mejor forma de encontrar vulnerabilidades para solucionarlas antes de que causen problemas.
Entre alguna de las funcionalidades que tienen, podemos encontrar el análisis del sitio (automatizado cada cierto tiempo) para eliminar malwares que puedan estarlo infectando. A la vez, evitan los datos maliciosos enviados por personas que quieren hackear la web. Un aspecto muy importante es que identifican aquellas “fisuras” que pueden perjudicarte en un futuro.

Existen muchas plataformas que brindan este servicio. Al haber varias, hay muchas opciones de planes según lo que necesites.

#3 Revisa las opciones de hosting web

Es probable que ya sepas qué es un hosting web. Pero en caso de que no, vamos a aclararlo dado que es importante para explicar por qué hay que analizarlo.

El hosting es un servicio de alojamiento web. Lo que hace, básicamente, es almacenar tu sitio web para que los usuarios puedan acceder a él a través de internet. Si el hosting falla, no se puede acceder a la web.

¿Por qué es necesario analizarlo? Bueno, dado que en este servicio se aloja tu sitio, si el servidor no cuenta con buenas medidas de seguridad y es atacado, tu sitio sufriría las consecuencias.
Existen proveedores de hosting web que brindan en conjunto la certificación SSL. A la vez, muchos poseen un sistema de alarmas que te avisan en caso de que tu sitio intente ser vulnerado de alguna forma.

#4 Realiza las actualizaciones necesarias

Muchas veces nos dejamos estar con el tema de las actualizaciones. Es una realidad, dedicar tiempo a esto puede ser tedioso. Principalmente, cuando las actualizaciones son recurrentes. Sin embargo, es necesario que se hagan en cuanto las plataformas lo notifiquen.

Estas actualizaciones, muchas veces tienen que ver con la resolución de vulnerabilidades del sitio o de los plug-ins. Si no se actualiza de forma correcta, la web va quedando obsoleta en cuestiones de seguridad por más que tomemos el resto de las medidas.
Tanto si se trata de un error crítico de anteriores actualizaciones o si es sólo algo de usabilidad, es importante ejecutar todas las actualizaciones que son requeridas.

#5 Olvida las contraseñas sencillas y repetidas

Hay una realidad: tener una única contraseña facilita las cosas para cuando tenemos que recordarla. Sin embargo, esto también hace posible que, si una persona accede a esa contraseña, puede ingresar en todas las cuentas donde la utilizas.

Tener múltiples contraseñas es muy importante. Pero más importante aún es que tengas múltiples contraseñas de acceso que sean complejas. ¿A qué nos referimos con complejas? Bueno, como mínimo, deben contar con una letra minúscula, una mayúscula, un número y algún signo en el medio.
Puedes utilizar diversas plataformas que generan claves dependiendo de los requerimientos que desees. Son aleatorias y puedes utilizarla en cualquier sitio.

Como puedes ver, cuidar la seguridad de tu web es posible llevando a cabo algunas medidas importantes. No es necesario que tengas grandes conocimientos para proteger a tu web y a todos aquellos que la navegan.